A Goodman se le adjudica como responsable por transportar gomas de autos y pallets, que posteriormente fueron utilizados para el fuego debajo de lo que es el recinto de la Legislatura, y a varios de ellos, arrojando estos materiales para avivar el fuego, según lo expresado por la fiscalía.

Cabe destacar que, desde la defensa, los abogados Miguel Moyano y Sergio Miranda, la acusación “es inadmisible y cae por su propio peso”, desechando los fundamentos de la fiscal Gómez, a quien le marcaron una serie de defectos.

Investigación ilegal

Santiago Goodman habló con la prensa y destacó: “Nosotros rechazamos la acusación de la fiscal Gómez y la que la querella plantea. En muchas de las pruebas se encuentran viciadas porque han sido realizadas en forma ilegal, investigaciones ilegales con videofilmaciones, fotos”.

“Entendemos que han armado un relato para armarnos una acusación y para poder sostenerla han tenido que utilizar información ilegal y en otros casos se han visto sucesos de ese día, y el problema es haber creado un relato. Ese relato es para poder sostener una falacia”, reflejó Goodman.

Fuerte declaración

Uno de los imputados, Matías Schierloh, tuvo su palabra y apuntó contra el Ministerio Público Fiscal “por el filtramiento a los medios de comunicación, entre ellos a ADN Sur el día 1 de julio de este año, previo a que nosotros y nuestros patrocinantes hayamos sido notificados. Eso ha causado en nuestra persona, un escarnio público sin nombre”.

También agregó Schierloh que “haber estado sometido a esa presión y ese sufrimiento que me ha causado daños inconmensurables, de tipo hasta de la salud mental, quiero manifestar como vergonzoso de haber filtrado esa información porque no solamente es la acusación la que se ha filtrado, sino nuestros datos personales, nuestros nombres, nuestros DNI, nuestros domicilios. Hay una violación a la intimidad y privacidad utilizados para otros fines, mediáticos y funcionales al gobierno en esta causa”.