Durante el debate en el Senado, Terenzi solicitó una moción de privilegio pidiendo que Milei se retractara por sus comentarios y publicaciones en redes sociales que afectaron a personas vulnerables, particularmente al gobernador de su provincia. Esta acción desencadenó una serie de amenazas hacia la senadora.

Terenzi denunció la naturalización de las agresiones y amenazas en la sociedad, especialmente en línea con la postura del presidente Milei. La senadora describió los mensajes recibidos, que incluían insultos y amenazas de violencia, como inaceptables y perturbadores.

La legisladora reiteró su convicción de que es necesario debatir sin recurrir al maltrato, responsabilizando directamente a Milei por su actitud agresiva. También respaldó la postura de Martín Lousteau, líder de su partido, quien había sido criticado por otro sector del espacio político. Terenzi compartió la opinión de Lousteau de que el DNU vulneraba la autoridad del Congreso.

A pesar de que el bloque senatorial votó mayoritariamente a favor del DNU, Terenzi afirmó que no cree en un quiebre dentro de la UCR, señalando las diferencias de situaciones entre las provincias. Destacó que su voto en contra fue respaldado por el gobernador de su provincia y argumentó que muchas provincias necesitaban protegerse de un posible asfixiamiento financiero por parte del gobierno nacional.